Es una carnosidad que empieza a afectar la parte exterior del ojo, que produce enrojecimiento, ardor e incomodidad para ver. No se opera con láser. El cirujano lo realiza a pulso y con bisturí. Aquí más que la tecnología, prima la destreza del especialista. Es un procedimiento invasivo porque tiene cortes y produce sangrado.
El procedimiento normal de pterigio o pterigión se realiza en la parte conjuntiva del ojo. Esta carnosidad se puede ver fácilmente y produce molestias como mala visión, escozor, enrojecimiento permanente y sensación de cuerpo extraño. El pterigio puede aparecer por situaciones genéticas asociadas a la exposición de los ojos al sol, al exceso de viento y a cosas climáticas o ambientes agresivos como contaminación ambiental.
El tratamiento recomendado para extraerlo es la cirugía. Requiere de una incapacidad mínima. Muchas veces es necesario retirar los puntos a la semana siguiente.
El pterigio después de operado puede volver a aparecer debido a la sensibilidad que ya han desarrollado los ojos, por eso se recomienda que en ambientes difíciles de contaminación o medio ambiente se utilicen gafas de protección.